En pleno siglo veintiuno, se me antoja necesario el reciclaje de una institución tan anquilosada como es la monarquía. Hay que darle una vuelta, encontrale una utilidad. Reconciliemos a los monarcas y a su familia con el pueblo. Y qué mejor uso para una monarquía moderna y renovada que servir de entretenimiento a sus súbditos. The royal bowling, el nuevo juego de bolos, muy pronto en todas las jugueterías.
Sinuosa, graciosa, exhuberante, morbosa, grácil y desbordante. Así es la venus de Van Hassel.
De todas las formas que avandonaron el lienzo para colonizar los espacios, esta es sin duda la más compleja e intrigante.
Los figurantes también reivindican una tercera dimensión que les permita habitar este mundo. Ocupar un espacio y demostrarnos de forma palpable, de cuerpo presente que ellos también existen. Aunque eso quizá nos traiga sin cuidado.
El mundo de las ideas toma formas puras, abstracciones en potencia de convertirse en cualquier cosa.
El mundo de las ideas se abre camino a través del lienzo. Y así, con suma violencia, las ideas irrumpen en el espacio y lo transforman. Se arraigan como las raíces, trepan como las enredaderas. Todo lo llenan, lo ponen todo patas arriba, hasta que se asientan y nos permiten comprender el nuevo orden impuesto por ellas.
Composición de tres piezas
Poliuretano, yeso y antigoteras
300 euros.
67x94x38 / 44x12x12 /38x24x64
Las ideas se juntan, se confunden, se intercambian, se solapan, se complementan. Juntas dan vida a nuevas ideas. Una sinergia con posibilidades impredecibles.
69x56x23
Poliuretano, yeso y acrílico.
200 eurosEl estrés y las prisas tienen loco a nuestro ejecutivo. La corbata se le vuela, los ojos se le salen; está deseando que llegue el fin de semana para mostrarle al mundo su verdadera identidad.
44x17x18
Poliuretano, yeso y acrílico.
200 eurosOtro figurante exiliado del lienzo que busca un futuro mejor en la tercera dimensión y por qué no, ya de paso, una mujer que lo quiera y lo cuide por el resto de su vida.
59x30x22
Poliuretano, yeso y spray plata.
100 eurosDe las idas a la abstracción pura. Sin camino, sin objetivos, sin parecidos. Eterna e imperecedera.
¿Acaso los artístas no fríen croquetas? De lo más sublime y celestial a lo más vulgar, sabroso y cotidiano. Ya es hora de que bajen de su torre de marfil y se pongan a fregar. Que no está la vida para tonterías.
Los hilos del Demiurgo atraviesan el lienzo, toman forma y comienzan a recrear una nueva realidad. El mundo de las ideas ocupando el mundo de lo concreto en una red interconectada que pone todas esas ideas en común y es capaz de crear otras nuevas. ¿No os suena de algo?